Compartir una niñera puede ser una solución eficiente y más asequible para el cuidado infantil, especialmente cuando dos familias buscan reducir costos sin sacrificar la calidad de la atención. Sin embargo, esta alternativa no está exenta de desafíos: desde problemas de comunicación y organización hasta asuntos legales y logísticos que pueden afectar la experiencia para todos los involucrados. Para que un acuerdo de «nanny share» funcione de forma armónica y beneficiosa, es fundamental evitar errores comunes que podrían complicar la dinámica desde el principio. Veamos de qué se trata.
Qué es un nanny share y por qué puede ser una buena idea
Un «nanny share» es cuando dos familias comparten los servicios de una misma niñera, dividiendo los costos y, en muchos casos, también los espacios de cuidado. Esta modalidad puede resultar ventajosa si se gestiona correctamente:
- Reduce costos: El salario de la niñera se divide entre dos familias.
- Mejora la socialización: Los niños conviven con otros, lo que favorece su desarrollo emocional.
- Más personalizado que una guardería: Las niñeras ofrecen atención más directa y ajustada a las necesidades específicas de cada niño.
Errores comunes al organizar un nanny share y cómo evitarlos
1. Elegir primero a la niñera y luego a la familia asociada
Es más sencillo encontrar una buena niñera que una familia compatible con tus valores, horarios y estilo de crianza. Por eso, conviene primero encontrar a la otra familia interesada y luego buscar juntas a la niñera ideal. Esto evita futuros conflictos de visión o expectativas.
Recomendación: Reúnete varias veces con la otra familia antes de comprometerte. Evalúa afinidades en rutinas, alimentación, disciplina y valores educativos.
2. Redactar una publicación de empleo sin detalles suficientes
Un anuncio vago o ambiguo puede atraer candidatos que no se ajustan a tus necesidades. Especifica:
- Horarios exactos
- Ubicaciones de trabajo
- Número de niños y edades
- Tareas esperadas (cocinar, limpiar, llevar al parque)
- Si es nanny share y cuántas familias están involucradas
Ejemplo de sección clara para tu publicación:
| Elemento | Ejemplo |
|---|---|
| Horario | Lunes a viernes, 8 a.m. a 4 p.m. |
| Lugar de trabajo | Alternado semanalmente entre dos casas |
| Edad de los niños | Dos bebés de 1 año |
| Tareas adicionales | Preparar alimentos simples, cambio de pañales, juegos |
| Tipo de contrato | Nanny compartida, contrato mensual, pago puntual |
3. No aclarar reglas y expectativas desde el inicio
El estilo de crianza puede variar drásticamente entre familias. Un aspecto clave del éxito en este tipo de acuerdos es alinear las reglas y formas de actuar ante ciertas situaciones.
Temas para alinear con la otra familia:
- Castigos o correcciones permitidas
- Uso de pantallas
- Horarios de siesta y comida
- Actividades permitidas fuera de casa
Es muy recomendable formalizar todo en un contrato firmado por ambas familias y la niñera.
4. Ignorar temas legales y de seguros
En la mayoría de países, una niñera contratada de forma recurrente se considera una trabajadora formal. Esto implica obligaciones legales como:
- Contrato por escrito
- Pago de cargas sociales o seguros
- Licencias por enfermedad o vacaciones
Consulta con un contador o especialista en temas laborales para saber cómo cumplir con las normas locales.
5. No planear vacaciones, licencias ni días de enfermedad
Un aspecto que suele generar fricciones es la gestión de ausencias. Asegúrate de acordar con antelación:
- Cuántos días libres tiene la niñera
- Qué pasa si una familia viaja y la otra no
- Qué hacer si la niñera se enferma
Ejemplo de planificación básica anual:
| Tipo de ausencia | Solución propuesta |
|---|---|
| Vacaciones de la niñera | Se eligen dos semanas fijas en el año |
| Enfermedad inesperada | La familia con horario más flexible cuida a los niños |
| Feriados nacionales | Pagados, sin trabajo |
6. No verificar referencias
No te saltes este paso. Habla con antiguas familias que hayan trabajado con la niñera. Pregunta sobre su responsabilidad, puntualidad, habilidades con niños y comunicación con los padres.
7. No hablar sobre gastos adicionales
Snacks, transporte, juguetes compartidos… estos gastos pequeños pueden acumularse. Acordar cómo se dividen desde el principio puede evitar discusiones.
Tip: Usa una hoja compartida (Google Sheets, por ejemplo) para registrar gastos adicionales y hacer balances mensuales.
8. No ser claro con la niñera sobre el tipo de trabajo
Desde el inicio, aclara que se trata de una posición de nanny compartida. Algunas niñeras prefieren cuidar a un solo niño o trabajar en un solo hogar. La transparencia ahorra tiempo y malentendidos.
9. No formalizar el pago correctamente
Si ambas familias están pagando “en negro”, podrían estar expuestas a sanciones. Además, no cotizar por los servicios puede perjudicar a la niñera si necesita beneficios sociales o antigüedad laboral.
¿Listo para organizar tu propio nanny share?
Compartir una niñera puede ser una experiencia enriquecedora y económica, siempre que se tomen en cuenta estos errores frecuentes y se planifique bien desde el principio. ¿Estás buscando una niñera confiable o una familia con quien compartirla? ¿Prefieres contratar directamente o a través de una empresa que te facilite todo el proceso?
Crea tu cuenta en Homepro y empieza hoy a conectar con niñeras calificadas o familias compatibles. En Homepro puedes:
- Publicar oportunidades de nanny share
- Encontrar niñeras independientes o contratar personal directo con respaldo
- Hacer reservas en línea y gestionar pagos fácilmente
Tu tranquilidad y la seguridad de tus hijos comienzan con una buena planificación y los aliados correctos.